Cumpleaños

Hoy, 26 de agosto, están cumpliendo años dos grandes amigas de adolescencia. Por razones del destino, no las veo desde hace casi dos décadas, pero en mi corazón sigue latiendo fuerte esa amistad. Miro hacia atrás y recuerdo otros 26 de agosto, los de los años 80, y vienen a mi memoria días alegres de miradas y risas de complicidad, de uniformes de colegio, de secretos en compañía, de chocolatinas, de papelitos con notas de T.Q.M, de bombas metalizadas, de copetes alf, de minifaldas y de sueños todavía no cumplidos. Hoy, tanto ellas como yo, somos mujeres hechas y derechas, casadas, con hijos; la vida nos ha llevado por caminos distintos, yo me he quedado aquí, ellas están lejos. Durante muchos años no hablamos, pero gracias a Facebook nos encontramos el año pasado y hemos entrado en contacto virtual.

Hoy me levanté, así como hace veintitantos años, con el afán de ser la primera en felicitarlas. Ya no vamos al colegio en la misma ruta, ya no puedo darles un abrazo y entregarles la tarjetica de Garfield con la chocolatina Jet, ya no puedo compartir con ellas, en vivo y en directo, una deliciosa torta de moca. Pero gracias a Facebook, a sus apps y al correo electrónico pude decirles: ¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS!!... ¡¡Que seas muy feliz!!... ¡¡Que Dios te bendiga!!... No sé si fui la primera, pero estoy feliz de que la tecnología me haya permitido hacer algo que durante estos veinte años he querido hacer todos los 26 de agosto.

María A., María J: ¡¡Feliz cumpleaños!!... Las quiero mucho.

Hasta la próxima,

ClaudiaR.